En una declaración trascendental, la Gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, ha rubricado el ‘Pacto por la Calidad Educativa’ junto a los alcaldes de los 34 municipios no certificados del departamento. Entre los puntos más destacados, se enfatiza la implementación de un innovador programa de formación técnica que busca «facilitar el acceso al mercado laboral para unos 6.000 jóvenes vallecaucanos».
La mandataria detalló el plan, indicando que «a medida que tengamos más aliados, iremos formando muchos más». El programa contempla cursos de un año para estudiantes de Once, mientras que los de año y medio serán destinados a aquellos en grado Décimo. La formación se llevará a cabo en «contra jornada», permitiendo a los jóvenes combinar estudios teóricos con experiencias prácticas en el ámbito laboral.
En este proceso de formación dual, el gobierno del Valle asumirá íntegramente el costo de los cursos. Como parte de una asociación estratégica con la empresa privada, los estudiantes recibirán «medio salario mínimo como compensación por su trabajo», una iniciativa diseñada para estimular la colaboración activa de la iniciativa privada en la formación de futuros profesionales.
Los elogios no se hicieron esperar por parte de los alcaldes, quienes destacaron el compromiso de la Gobernadora con la educación inclusiva y el desarrollo laboral de los jóvenes. Manuel Felipe Quintero, alcalde de Sevilla, afirmó que «es fundamental lo que está haciendo la Gobernadora» y resaltó la importancia de incluir a todos los sectores y municipios en esta iniciativa.
Además de la formación técnica, la Gobernadora también se comprometió a mejorar la infraestructura educativa para garantizar «espacios adecuados en el proceso de aprendizaje». Estas mejoras fueron acogidas con entusiasmo por los alcaldes, quienes señalaron la urgencia de invertir en la reparación y mejora de las instituciones educativas existentes.
A través del ‘Pacto por la Calidad Educativa’, la Gobernadora del Valle y los alcaldes establecieron compromisos concretos para asegurar que niños, niñas y adolescentes disfruten de las mejores condiciones para asistir a clases. Este pacto representa un hito significativo en el fortalecimiento del sistema educativo y la promoción del desarrollo integral de las nuevas generaciones en la región.