En el dinámico mundo del patinaje artístico, dos jóvenes talentos están captando la atención con su pasión y habilidad: Emily Quintero y Gabriela Jaramillo. Ambas atletas han demostrado un compromiso excepcional desde temprana edad, destacándose no solo por su destreza en la pista, sino también por sus aspiraciones ambiciosas.
Emily Quintero, a sus cortos 7 años, ya ha establecido un vínculo profundo con el patinaje. Inició su viaje en este deporte a la temprana edad de 2 años y desde entonces no ha mirado atrás. Inspirada por la belleza del patinaje y el apoyo constante de sus padres desde España, Emily sueña con convertirse en una profesional destacada y aspira a ser campeona mundial, representando con orgullo a su municipio y departamento.
Por otro lado, Gabriela Jaramillo, próxima a cumplir 14 años, ha acumulado una impresionante trayectoria desde que comenzó a patinar a los 7 años en un club local en Tuluá. Su amor por el patinaje la impulsó a participar en diversos eventos como juegos departamentales e intercolegiados, acumulando experiencias enriquecedoras y fortaleciendo su determinación por alcanzar metas mayores. Con el deseo ferviente de ser parte de la selección Colombia y eventualmente convertirse en campeona mundial, Gabriela se presenta como una promesa brillante en el deporte.
Ambas jóvenes coinciden en la importancia del patinaje como una vía para aprender, crecer y cultivar valores esenciales. Su dedicación y perseverancia son ejemplos inspiradores para otros jóvenes que buscan encontrar su pasión y desarrollarse en el deporte.
Con un futuro prometedor por delante, Emily Quintero y Gabriela Jaramillo continúan dejando una marca positiva en el mundo del patinaje, demostrando que con determinación y apoyo, los sueños pueden convertirse en realidad sobre ruedas.