En un vibrante duelo disputado en Tuluá, Nariño FS experimentó un amargo revés frente al equipo local en un partido que estuvo marcado por momentos de tensión y decisiones arbitrales discutidas. Desde el inicio, el equipo dirigido por Henry Javier Rosero mostró un desempeño sólido, manteniendo el control del balón y dominando gran parte del encuentro.
Sin embargo, hacia el final del juego, una serie de errores y una decisión arbitral polémica inclinaron la balanza a favor de Tuluá, dejando a Nariño FS con un resultado que no reflejaba completamente su esfuerzo y dominio en el campo. El técnico Henry Javier Rosero expresó su decepción por el desenlace del partido, señalando la dificultad de jugar en una plaza tan complicada como la de Tuluá.
El arquero Brayan Murillo también compartió su perspectiva sobre el encuentro, destacando los momentos de buen juego de Nariño FS y lamentando las decisiones arbitrales que, a su juicio, influyeron negativamente en el resultado final. A pesar de la derrota, Murillo enfatizó la determinación del equipo por seguir trabajando duro y corregir los errores de cara a futuros compromisos en la fase de eliminación sencilla contra Risaralda.
El equipo ahora se centra en recuperarse rápidamente de este tropiezo y prepararse para los desafíos venideros, con el firme objetivo de avanzar en el torneo y demostrar su capacidad competitiva en cada partido que disputen.
Esta derrota, aunque dolorosa, sirve como motivación adicional para Nariño FS, quienes buscarán aprender de esta experiencia y mejorar en todos los aspectos de su juego de cara a los próximos desafíos en la competición.