El pasado sábado, el Coliseo Manuel Victoria Rojas fue el escenario de una vibrante celebración por el Día del Niño, donde cientos de familias se reunieron para disfrutar de un evento lleno de magia y diversión. Organizada por la administración municipal, la actividad buscó fomentar la unión familiar y proporcionar a los más pequeños un espacio seguro y festivo.

Desde las primeras horas de la mañana, el coliseo recibió a familias enteras, muchas de ellas disfrazadas, listas para disfrutar de un día inolvidable. Los niños tuvieron la oportunidad de participar en diversas actividades diseñadas especialmente para ellos, como bailes, brinca brincas y emocionantes inflables que llenaron el lugar de risas y alegría.

Luz Elena Londoño, gestora social de Tuluá, expresó su satisfacción por el evento. “Fue algo maravilloso. La administración municipal se convirtió en artista para compartir este día tan especial con la ciudadanía. Agradezco a todos los que nos acompañaron y disfrutaron de este hermoso espacio,” comentó.

El evento atrajo a más de 8 mil personas, quienes compartieron momentos de alegría y diversión. “Sacamos nuestro niño interior y pasamos un día increíble. Las diferentes dependencias municipales se comprometieron a hacer de este evento un momento único, ofreciendo dulces, helados, paletas y crispetas,” agregó Londoño.

La celebración fue palpable, logrando crear un mundo de fantasía para los niños. “Estamos muy felices porque cumplimos con el objetivo de hacer que nuestros niños pasaran un día realmente especiales,” concluyó Londoño, resaltando la importancia de estos eventos para la comunidad.

La celebración del Día del Niño en Tuluá no solo honró a la infancia, sino que también sirvió como un recordatorio del valor de la unión familiar y la alegría compartida, dejando una huella memorable en todos los asistentes.

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