Un nuevo acto de violencia conmocionó a la comunidad de Buenaventura la noche del 10 de noviembre, cuando Luis Enrique Olave Ángulo, de 46 años, fue asesinado con arma de el barrio Cascajal. El ataque ocurrió aproximadamente a las 9 de la noche, cuando Olave Ángulo y otro hombre, identificado como Leandro Bravo Salcedo, se encontraban dentro de una tienda en la carrera 57 con calle 3.
Según las autoridades, un grupo de personas desconocidas llegó al lugar y abrió fuego de manera indiscriminada, hiriendo a las dos víctimas. Olave Ángulo sufrió múltiples impactos de bala, lo que provocó su muerte poco después de ser trasladado a la clínica Santa Sofía, donde recibió atención médica. Bravo Salcedo, por su parte, resultó herido, pero logró sobrevivir y fue dado de alta tras recibir la atención correspondiente.
El Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía llegó al lugar para realizar la inspección técnica al cadáver y iniciar las investigaciones. Las autoridades han confirmado que están trabajando en esclarecer el móvil del crimen y dar con los responsables, aunque, por el momento, no han proporcionado detalles adicionales sobre los agresores.
El Coronel Hernando Barajas, comandante del Distrito Especial de Policía de Buenaventura, se pronunció sobre el caso, expresando su rechazo ante el asesinato y reafirmando el compromiso de las autoridades para esclarecer el crimen. “Este tipo de hechos no pueden quedar impunes. Estamos haciendo todo lo posible para dar con los responsables y frenar la violencia en nuestra ciudad”, afirmó Barajas.
Buenaventura, uno de los principales puertos marítimos del país, ha sido escenario de altos niveles de violencia en los últimos años, principalmente asociados con actividades ilegales, como el narcotráfico y las disputas entre bandas criminales. A pesar de los esfuerzos por mejorar la seguridad en la región, los habitantes de la ciudad siguen enfrentando una creciente preocupación por la inseguridad.
Las autoridades han intensificado las investigaciones para dar con los responsables del asesinato y esclarecer las causas del ataque. Además, la Policía ha reforzado su presencia en el barrio Cascajal y en otras zonas de Buenaventura con el fin de garantizar la seguridad de los residentes y prevenir nuevos hechos de violencia.
Este asesinato se suma a una serie de incidentes violentos que han afectado a la región en los últimos meses. Mientras tanto, la comunidad local sigue en espera de respuestas, buscando justicia para Luis Enrique Olave Ángulo y su familia, que ahora enfrentan una tragedia que deja en evidencia la creciente ola de violencia en la ciudad.
Las autoridades instan a la ciudadanía a colaborar con cualquier información relevante para esclarecer los hechos y capturar a los responsables de este crimen.