El pasado viernes 29 de noviembre, uniformados del Departamento de Policía Valle, en colaboración con la Fiscalía General de la Nación y la Gobernación del Valle, llevaron a cabo un operativo en el que lograron desarticular una de las principales estructuras criminales del departamento: el Grupo Delincuencial Común Organizado “Nueva Generación”. Durante la operación, fueron abatidos tres presuntos integrantes de la banda, entre ellos, el cabecilla alias “El Pri”.
Según los informes oficiales, alias “El Pri” era el líder principal de la organización y uno de los criminales más buscados por las autoridades. Se le atribuían varios delitos, entre ellos, concierto para delinquir con fines de homicidio y tráfico de armas de fuego. Además, su grupo venía generando un impacto negativo en varias zonas del norte del Valle, afectando municipios como Ansermanuevo, El Águila, corregimiento Villanueva, La Hondura, La Puerta, La María y otras áreas rurales cercanas a la frontera con Risaralda.
Las investigaciones revelaron que alias “El Pri” tenía una trayectoria criminal de más de ocho años. En 2020, se unió al GDCO Nueva Generación, una organización liderada en ese entonces por alias “El Zarco”, quien fue capturado en 2024. Con la caída de «El Zarco» y de alias «Fantasma», alias “El Pri” asumió el liderazgo del grupo y continuó con las actividades criminales, principalmente en el tráfico de estupefacientes y la confrontación con otras bandas como el GDO Los Flacos.
Alias “El Pri” fue señalado también de expandir el control criminal sobre las zonas rurales del Valle del Cauca, utilizando tácticas violentas y manipulando a menores de edad para llevar a cabo sus actividades delictivas. Esta expansión territorial y el incremento de homicidios asociados al narcotráfico y el control de rutas ilegales generaron una creciente preocupación en las comunidades afectadas.
Junto a “El Pri”, fueron abatidos alias “Piolín” y alias “Noño”, quienes integraban el círculo cercano de seguridad del cabecilla. Ambos eran conocidos por su rol como sicarios encargados de proteger a alias “El Pri” y garantizar la seguridad de sus actividades criminales.
Este golpe a la estructura del GDCO Nueva Generación es considerado un avance significativo en la lucha contra el crimen organizado en la región. Las autoridades continúan trabajando en desmantelar completamente las redes delictivas y restaurar la seguridad en las zonas más afectadas del Valle del Cauca. La operación demuestra el compromiso del Estado en la lucha contra las organizaciones criminales, el narcotráfico y la violencia que han marcado la historia reciente de la región.