El 30 de noviembre y 1 de diciembre, miles de familias tulueñas se reunieron para dar la bienvenida al último mes del año, celebrando el tradicional Día de Velitas y el inicio de la temporada navideña. Este año, el municipio implementó medidas preventivas a través de un decreto municipal, con el objetivo de garantizar la seguridad de los ciudadanos durante las festividades.
El Secretario de Gobierno de Tuluá, José Martín Hincapié Álvarez, ofreció un balance sobre el fin de semana de Alborada, resaltando las medidas preventivas adoptadas por la administración municipal para garantizar la seguridad y el orden público en la ciudad.
El funcionario destacó que, «se adoptaron medidas de manera preventiva mediante decreto municipal y efectivamente esto permitió prevenir situaciones de alto riesgo que afectaran la integridad en la vida y la salud de las personas». Según Hincapié, la respuesta de la ciudadanía fue positiva, con un «acatamiento general de las medidas» y un comportamiento ejemplar en la mayoría de los sectores de la ciudad.
El operativo contó con el apoyo de diversas instituciones, como la Policía Nacional, el Ejército, y otras entidades del gobierno municipal, incluyendo la Secretaría de Salud y la Comisaría de Familia. «Hubo un dispositivo bastante amplio que arrojó que no hubiera indicadores negativos de mayor impacto», añadió el Secretario de Gobierno.
Sin embargo, dos incidentes fueron reportados por el Hospital Tomas Uribe, uno en la zona de media y alta montaña de Tuluá y otro en la zona rural plana, aunque sin mayores consecuencias. Además, «se presentaron algunos motociclistas que buscaron retar la autoridad», pero en general, no hubo mayores incidentes que lamentar.
Uno de los aspectos más destacados fue el control del evento masivo en el barrio del Jardín, conocido por su desorden en años anteriores. «Se pudo controlar ese evento masivo, descontrolado, descomunal, que se presentaba en el barrio del Jardín. Este año no se dio. Hubo un muy buen dispositivo que permitió que la gente pudiera estar en paz y en tranquilidad», indicó Hincapié Álvarez.
El operativo, denominado Plan Alborada, comenzó el sábado a las 2:00 p.m. y se extendió hasta las 5:30 a.m. del domingo. Más de 100 personas participaron en la estrategia interinstitucional que permitió la tranquilidad en las calles y la protección de la ciudadanía.
El Secretario también enfatizó que las medidas preventivas seguirán vigentes, especialmente en cuanto al uso de pólvora. «Ahora viene para el resto de la temporada unas disposiciones especialmente en el manejo y uso de pólvora de manera indiscriminada», indicó. Además, hizo un llamado a los padres de familia, señalando que «la primera responsabilidad la tienen los padres de familia», especialmente en la protección de menores ante el uso indebido de estos artefactos.
Con un enfoque en la seguridad y el bienestar colectivo, Tuluá cierra el fin de semana de Alborada con un saldo positivo, destacando la importancia de la colaboración entre la comunidad y las autoridades locales para garantizar la paz en el municipio.