El Departamento de Policía Valle ha reportado un aumento del 19% en las denuncias por extorsión en comparación con el mismo periodo del año anterior. Esta cifra refleja un crecimiento significativo en la confianza de la ciudadanía para reportar este delito, una tendencia que ha sido impulsada por las campañas de sensibilización como «Yo no pago, yo denuncio», promovida por el GAULA Valle.
Según el Mayor Juan Pablo Henao Agudelo, comandante del GAULA Valle, este incremento no necesariamente significa que los casos de extorsión hayan aumentado, sino que hay una mayor disposición de la población para denunciar. «Este aumento en las denuncias es el resultado de la credibilidad que la comunidad tiene en las instituciones encargadas de la seguridad, y es fundamental para el avance de las investigaciones», explicó Henao Agudelo.
En cuanto a los datos específicos, el 19% corresponde exclusivamente a las denuncias presentadas por los ciudadanos, lo que equivale a 80 casos más que en el año anterior. Este aumento refleja el éxito de las campañas de sensibilización, que han fomentado una cultura de denuncia y colaboración con las autoridades.
El análisis de la situación también ha permitido identificar los municipios más afectados por la extorsión. Buenaventura lidera la lista con el mayor número de denuncias, seguido por Tuluá, Palmira, Buga y Dagua. Estos municipios han sido señalados como los principales focos de atención para las autoridades, que siguen trabajando en el fortalecimiento de sus estrategias de seguridad.
El aumento en las denuncias por extorsión es considerado un avance positivo, ya que permite una mayor recolección de información y una mejor focalización de los esfuerzos para desarticular las estructuras criminales que operan en la región. Las autoridades del GAULA Valle destacan que la colaboración de la ciudadanía es crucial para lograr resultados efectivos en la lucha contra la extorsión.
En conclusión, el incremento en las denuncias demuestra que la ciudadanía está tomando un papel activo en la lucha contra este delito. La participación comunitaria, junto con el trabajo de las autoridades, es clave para seguir avanzando en la erradicación de la extorsión en el Valle del Cauca.